La ira es una emoción primaria, eso quiere decir que es ancestral y que está con nosotros por que tiene un papel en nuestra supervivencia y por que a nivel evolutivo nos ha servido para algo. Con respecto a su definición, nos quedamos con la que aporta (Izard, 1977):
“La ira es una emoción primaria que surge cuando un organismo es bloqueado en la consecución de una meta o en la obtención o satisfacción de una necesidad.”
Está formada por tres componentes: el neurofisiológico, el cognitivo y el conductual. El organismo reacciona en forma de ataque o defensa produciendo en éste un efecto vigorizador que lo prepara para superar los obstáculos que le presenta el entorno. Las respuestas conductuales que la ira puede llegar a ofrecer en su forma más extrema de expresión; laagresividad, son un problema del que la psicología cognitivo-conductual se ha ocupado tradicionalmente.
¿Por qué siento ira?
Todos en algún momento de nuestras vidas hemos perdido el control, ¿quién no recuerda haber gritado a alguien que no se lo merecía, haber montado un numerito delante de los amigos a su pareja o haberle dado una patado a algo en un momento de estrés máximo? La ira surge como respuesta a la sensación de inseguridad, celos, miedo, envidia y en general a una interpretación de injusticia.
Cuando creemos que se han transgredido nuestros derechos, que algo se ha interpuesto entre nuestros deseos y la consecución de los mismos puede nacer con mucha virulencia, especialmente si creemos que además eso es una amenaza; a nuestro amor propio, a nuestra vida o a algo que sea importante para nosotros. En resumen, la ira se dispara automáticamente cuando creemos truncado el camino hacia nuestros objetivos.
Existen distintos tipos de ira, en común tienen todas ellas que hay una interpretación previa de algo y que podemos aprender a modular su pexresión, no se trata de suprimir el sentimiento si no de saber gestionar cómo lo expresamos a través de nuestra conducta.
Tipos de ira
- Ira instrumental: Es el tipo de ira que sirve para conseguir algo, hemos interpretado que la agresividad es una vía para la consecución de nuestros objetivos, es decir es casi como una herramienta o “instrumento”. Es una conducta aprendida generalmente de los modelos ambientales que hayamos tenido. ¿Quién no recuerda a alguna persona de su entorno que consigue todo a base de gritos y amenazas? Podemos aprender otras formas de conseguir lo que queremos y modularemos la expresión de la ira instrumental, reduciéndola a un uso esporádico y no princial.
- Ira defensiva: Aquí hemos interpretado que un hecho concreto puede ser una dificultad o amenaza a nuestra persona. La inseguridad puede estar detrás y el miedo. Por tanto para defendernos de ello, atacamos.
- Ira acumulada: Una de las más habituales y por las que las personas acuden a nuestra plataforma. Vamos intentando soportar determinados sentimientos de injusticia en diversas áreas y situaciones, no muy intensos, pero ahí están, y un día no sabes cómo te ves a ti mismo montando un cirio a la teleoperadora que te ha llamado para ofrecerte un servicio, ¿os suena? Esto es por que no hemos gestionado adecuadamente esas situaciones anteriores y realmente no las hemos suprimido (eso es imposible por cierto, no existe la supresión de las emociones salvo que tengas un problema de psicopatía, solo existe la represión que al final se desborda, además),por tanto no respondes a ese estímulo concreto que es la molestia que te supone que te llame la teleoperadora, respondes a todos los demás juntos.
Cómo manejar la ira: 3 pistas
- Primero debemos averiguar si lo que nos produce rabia es evitable o no.
- Si es evitable, ¿por qué te mantienes en esa situación?
- Si es inevitable, ¿puedes cambiarla? Si la respuesta es afirmativa, ¿a qué esperas?, la agresividad no es la mejor manera de hacerlo, piensa en otras formas de conseguir ese cambio más efectivas y menos dañinas. SI la respuesta es negativa, intenta trabajar la aceptación; no pierdas energía en aquello que no puedes cambiar, céntrate en lo que sí puedes, y lo más difícil de todo siguiendo la cita del filósofo estoico Marco Aurelio, ten sabiduría:
“La sabiduría es el arte de aceptar aquello que no puede ser cambiado, de cambiar aquello que puede ser cambiado y, sobre todo, de conocer la diferencia.”
Existen también técnicas muy concretas para manejar la ira al momento que puedes aprender con tu psicóloga a través de la realización de sesiones por chat en nuestra plataforma de psicólogos establecida en España. ¿Quieres liberarte de la ira?
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